Carlos Daniel, un apasionado de las nuevas tecnologías y desarrollador de software de Guinea Ecuatorial, comparte su inspiradora experiencia en Níger, donde este 2025 pudo cumplir un compromiso que había asumido años atrás. Todo comenzó tras escuchar al Padre Rafael hablar sobre un proyecto en las ciudades de Dosso y Zinder, donde se brinda apoyo a niños con discapacidad.
Con mucha ilusión, Carlos se unió al proyecto, ofreciendo formación en tecnologías y orientación a estudiantes, profesores y al equipo de la Asociación. Durante un mes y una semana, compartió sus conocimientos y vivió una experiencia única y enriquecedora:
«Ha sido una formación bastante completa. Yo salgo muy satisfecho después de haber compartido tanto tiempo ahí con todos ellos. Ha sido un paso grande tanto para mí como para ellos».
Carlos regresa a casa con el corazón lleno de gratitud y el firme deseo de seguir apoyando este proyecto en el futuro. Un agradecimiento especial al Padre Rafael y a todas las personas que hicieron posible este encuentro de formación y esperanza.