El 27 de marzo de 2016 un terrible ataque suicida causó la muerte de 76 personas en la entrada principal del parque Gulshan-e-Iqbal, uno de los más grandes de Lahore.
El 27 de marzo de 2016 un terrible ataque suicida causó la muerte de 76 personas en la entrada principal del parque Gulshan-e-Iqbal, uno de los más grandes de Lahore.
La meta de los Peace Feeder School (PFS) es facilitar la disminución del nivel de analfabetismo y crear oportunidades de educación para niños y niñas de entre 5-10 años.
En esta ciudad a 32 km. de Lahore viven alrededor de 700 familias; 400 musulmanas y 300 cristianas. La mayoría de estas familias, cada una con 4-5 hijos, son muy pobres y viven bajo el umbral de la pobreza.
Las inundaciones que sufrió Pakistán durante el mes de agosto de 2010 fueron catastróficas. En sus 63 años de historia nunca vivió nada igual. Según uno de los últimos informes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) las cifras son brutales, aunque difíciles de concretar: más de 1500 muertos, cientos de aldeas arrasadas, ganado y cultivos destruidos, alrededor de 20 millones de damnificados, una quinta parte del país anegada (equivalente al territorio de Reino Unido)… En suma, devastación.
La situación en Pakistán es realmente terrible. Los ataques terroristas se han vuelto tan comunes que nadie se siente seguro. Por ejemplo, el 27 de mayo, una potente bomba estalló en Lahore. Este devastador ataque suicida dejó 30 muertos y 395 heridos.