Las Hermanas Misioneras Dominicas del Rosario llegaron a Ahmedabad, Gujarat, una ciudad industrial de fábricas textiles, para abrir un hospital. Muchas de estas personas son trabajadores sin tierra procedentes de zonas rurales que emigraron a la ciudad en busca de una vida mejor. Cuando se cerraron las fábricas textiles en la década de 1970, muchos hombres perdieron sus empleos, dejando a las mujeres como único sostén de sus familias. Preocupadas por su bienestar económico y físico, las hermanas organizaron un centro de costura y bordado en el que mujeres hindúes, musulmanas y cristianas podían trabajar juntas utilizando habilidades tradicionales para crear obras de arte.

La comunidad tiene muchas actividades de desarrollo integral para mujeres y niños. Una de ellas es la conocida como St. Mary's Mahila Shikshan Kendra.  Hoy en día, El Centro imparte un curso de dos años de duración de sastrería, bordado, auxiliar de enfermería y cuidados de belleza, lo que permite a las mujeres ser contratadas en nuestro centro de producción, así como adquirir un empleo en cualquier otro lugar o incluso trabajar por cuenta propia en casa. También hay programas de salud, así como de ahorro y préstamo, y la organización se asegura de que las mujeres envíen a sus hijos a la escuela para evitar el trabajo infantil.

El tiempo de la pandemia ha sido un momento agotador para el centro y las mujeres y familias que trabajan y colaboran en nuestra misión. Se llegó a ejecutar la campaña de ayuda para poder aliviar al menos un poco la situación de estas personas.  A partir de la contribución y solidaridad de neustros socios de Acción Verapaz, se entregó 8000 euros para ayudar a las familias más necesitadas. Como la situación de la pandemia afectaba a todo el mundo, se eligió a las familias más vulnerables. Un total de 225 familias, lo que supone más de 1350 personas (con una media de 5 a 7 miembros por familia).

Se puso en contacto con todos los vendedores para comprar granos y otros productos básicos a un precio razonable. Toda la Comunidad de las Hermanas Misioneras Dominicas estuvo presente para distribuir los alimentos. Se hizo en un ambiente de familia, explicándoles los rostros ocultos y los sacrificios de la gente sencilla de España, que aunque no nos conocen personalmente, han sido generosos al compartir lo poco que tenían a través de la organización  Acción Verapaz. Una vez entendido esto, las personas expresaron su agradecimiento a todos los donantes y a Acción Verapaz por su iniciativa y trabajo por el bienestar de las personas que necesitan. También les envian oraciones especiales y buenos deseos a todos los donantes de parte de las familias que recibieron los beneficios.

Cada familia recibió un gran kit (como se puede ver en las fotos) que contenía trigo, arroz, aceite, sal, azúcar, hojas de té, cereales, jabones, detergente en polvo, pasta de dientes y mascarillas, que son los elementos esenciales del día a día. Hubo una gran alegría y lágrimas de gratitud, como expresaron algunas de las mujeres: "Nuestra ración se acabó y nos preguntábamos qué hacer ahora y Dios nos ha ayudado a través de vosotras a conseguir el alimento..."

Otro sector que se ve muy afectado son los niños y su educación. Para asegurar un futuro mejor para ellos, los padres los han matriculado en escuelas donde imparten una enseñanza de calidad. Debido al cierre de las escuelas y a la falta de conocimientos y equipos tecnológicos, muchos de estos niños no pudieron sacar provecho. Por otra parte, no tenían dinero para pagar las cuotas. Entre todos los alumnos elegimos a los 33 que más cercanos, pagamos sus cuotas directamente a los bancos desde donde cobran las escuelas, para asegurar la continuidad de su educación.